La mujer, baleada a 9km de la vía Duarte,
hacía su carrera universitaria vendiendo dulces en bandeja en la vereda de una parada de colectivo camino al Cibao.
Quienes compartieron su día a día con las víctimas encendieron velas y pidieron no quedar impunes.
Nuris Suero, de 48 años, fue una mujer luchadora alegre y querida y admirada por quienes la conocen. Con su modestia, completó con éxito una licenciatura en psicología.
Pero el pasado sábado sucedió lo inesperado. Un hombre a bordo de una motocicleta y con casco protector acabó con su vida propinándole varios disparos.
El crimen quedó captado en cámara y el victimario emprendió la huida. Hoy el lugar donde Nuris tenia habilitada la paletera luce triste y desolado.
Con el crimen quedan dos niñas huérfana de madre y trascendió que residía en el sector Pantoja.
Con información de: NTelemicro